La tarifa de energía eléctrica aumentará al menos un 200% este mes y la de gas un 150%, de acuerdo a un documento que giró el gobierno al Fondo Monetario Internacional, en el cual se compromete a reducir gastos en un 3% del Producto Bruto Interno para alcanzar el equilibrio de las cuentas públicas.
La Argentina acordó con el FMI tener una “racionalización de los subsidios energéticos ineficientes, que inicialmente estarán respaldados por un ajuste en las tarifas de electricidad y gas a partir de febrero”. En ese marco, la reducción de este renglón equivaldrá al 0,5% del PBI.
El recorte es de alrededor de un punto del producto, si se tiene en cuenta que el año pasado, los subsidios a la energía costaron US$2600 millones al Tesoro, con una incidencia de alrededor de 1,5% del PBI.
“Tras un aumento inicial en febrero, los precios del gas y la electricidad alcanzarán rápidamente una recuperación de costos en abril de 2024, excepto para los hogares más vulnerables, en línea con la reducción programada de los subsidios a la energía en un 0,5% del PBI este año”, dice el informe al FMI.
En lo que respecta a los aumentos de gas, el Ministerio de Economía decidió postergarlos para marzo, según le informó a las empresas distribuidoras. En electricidad, todavía no hubo pronunciamiento de la Secretaría de Energía, pese se esperaba que publique los nuevos cuadros tarifarios hace unos días.
Mientras tanto, los subsidios a la energía se dispararon aún más en diciembre, luego del salto del tipo de cambio oficial de 120%, ya que los contratos están dolarizados. Esto impactará en las cuentas públicas a partir de marzo, ya que el Gobierno le paga a los generadores y productores de gas con 60 días de plazo. (DIB) AL