Un torneo de fútbol femenino que se desarrolló el pasado fin de semana en Pilar fue el escenario de una polémica que se generó cuando una empresa fabricante de productos de higiene y limpieza desembarcó con una acción de márketing que dejó en evidencia que la lucha por la igualdad de género aún debe seguir profundizándose.
Todo sucedió en uno de los tantos torneos en el que las mujeres son las protagonistas, eventos que van cada vez más en crecimiento en la zona norte.
Allí, la empresa Procter & Gamble participó de la jornada con una acción que buscaba promocionar sus productos con premios para los que quisieran participar.
Pero la consigna que había que cumplir para acceder a los premios indignó a las participantes de los equipos de fútbol.
Según detallaron algunas de ellas a Pilar de Todos, la empresa proponía que los hombres que se acercaran a un stand donde se montó una peluquería y se cortaran el cabello, se llevaban como premio una pelota de fútbol.
Mientras que para las mujeres los obsequios disponibles eran detergentes, toallas femeninas y jabones, entre otros.
"A los hombres les cortaban el pelo con el estilo que ellos querían y el que lo hacía se llevaba la pelota de fútbol. A las mujeres que se acercaron a participar, no las dejaron cortarse el pelo para ganarse las pelotas. Después de quejarnos, accedieron... pero el corte era un rapado y aun así no nos querían dar la pelota", contó Ayelén Ruiz, una de las integrantes de uno de los equipos de fútbol que presenció la malograda acción de difusión.
Ruiz detalló además que en el predio donde se llevaba cabo la actividad, la firma había montado una pantalla táctil en la que accionándola, se accedía al resto de los "premios" mencionados.
"Quienes llevaban adelante la acción nos decían ´Te vamos a rapar y no te vas a ganar nada, andá a jugar a la pantalla, donde había como premios detergentes y toallitas. Lo indignante es que nosotras estábamos ahí jugando en un torneo de fútbol femenino, y no nos dejaban participar por las pelotas", remarcó Ruiz.
La situación vivida, en un contexto social de creciente lucha por la igualdad de género, las llevó a elevar una queja a las autoridades de la empresa responsable de la campaña.
"Tuvimos respuesta de la gerente de P&G en Argentina que es mujer y no lo podía creer. Nos pidió disculpas y nos dijo que en realidad eran dos acciones que se tenían que llevar a cabo por separado", remarcó Ruiz al tiempo que agregó que desde la empresa prometieron equiparar los premios.