Un menor de 2 años falleció en las últimas horas producto de haber recibido golpes, abusos y hasta quemaduras.

El niño, Thiago Fleitas, murió el viernes en el Hospital Sanguinetti de Pilar, y la autopsia reveló claros signos de ataques, algunos recientes y otros de algunos meses.

Por el caso, la Justicia decidió detener al padrastro de la víctima, Ariel Farías, y se investiga además si hubo responsabilidad en el resto del entorno familiar, como el caso de la madre, identificada como Pamela Palacios, informaron fuentes policiales a Pilar de Todos, en una causa que se investiga en la UFI 2 de Pilar, a cargo de Andrés Quintana.

En principio, la muerte del pequeño se habría producido por una hemorragia interna fruto de un fuerte golpe recibido en la zona abdominal.

Las pesquisas determinaron, además, otros golpes en el resto del cuerpo, como el rostro, quemaduras en genitales, y lesiones compatibles con abuso sexual, aunque no todos los signos serían recientes, por lo que se cree que los ataques venían desde hace varios meses.

El nombre de Pamela Palacios se hizo conocido públicamente hace unos 2 años, cuando su pareja de aquel momento, Ezequiel Fleitas, padre de Thiago, prendió fuego la casa que la mujer habitaba con dos de sus hijas y mientras cursaba el embarazo del menor asesinado.

Pudo escapar de la vivienda, en San Alejo, el agresor fue detenido, y la comunidad se movilizó para reconstruirle la casa.

Familiares del chico aseguraron que se habían radicado denuncias previas pero la Justicia no había intervenido a tiempo para evitar el desenlace.

"Justicia por Thiago, se hizo denuncia y no actuaron. Fue abusado y golpeado hasta causarle la muerte", publicaron familiares del menor en redes sociales.