El gobernador Axel Kicillof dio este jueves un fuerte respaldo al paro general convocado por la CGT y criticó con dureza el rumbo económico de la administración de Javier Milei, a quien acusó de aplicar políticas “antiargentina” y de provocar un “industricidio”.
“Este Gobierno Nacional desertor debe poner un freno a sus políticas anti argentinas. Desde la Provincia de Buenos Aires seguiremos haciendo todos los esfuerzos posibles para sostener la producción y defender los puestos de trabajo. Seguiremos defendiendo los derechos de las y los bonaerenses”, señaló Kicillof en X.
“Caen la producción, el empleo y los salarios, se aceleran los despidos y Milei pretende erradicar los derechos laborales. Por eso, los trabajadores y trabajadoras van al paro”, analizó.
En un extenso posteo en las redes sociales, el mandatario bonaerense consideró que “las políticas del Gobierno Nacional están destruyendo la producción, especialmente la industrial: comparado con el año anterior, en marzo, la industria manufacturera cayó más de 20 puntos y la construcción se desplomó más de 40%. Como lo veníamos advirtiendo, Milei desencadenó un industricidio. Desde que asumió, el acumulado de la contracción industrial alcanza el 14,8%, mientras que en el caso de la construcción llega al -30,3%”.
Las políticas del Gobierno Nacional están destruyendo la producción, especialmente la industrial: comparado con el año anterior, en marzo, la industria manufacturera cayó más de 20 puntos y la construcción se desplomó más de 40%. Como lo veníamos advirtiendo, Milei desencadenó un… pic.twitter.com/270xwXIdrH
— Axel Kicillof (@Kicillofok) May 9, 2024
Además, continuó dando un panorama económico con cifras y gráficos: “Todos los bloques industriales cayeron en marzo, con retrocesos que oscilaron entre -8% y -43%. En la construcción, el dato más significativo es el del asfalto: -69,2%, el freno de la obra pública ya muestra sus efectos devastadores”.
En ese sentido, consideró que “las consecuencias de esto son concretas: cada vez más argentinos y argentinas van perdiendo su fuente de trabajo. Según los últimos datos disponibles, entre noviembre 23 y enero 24, 32.500 trabajadores y trabajadoras de la construcción perdieron su empleo asalariado registrado; en la industria el número asciende a 3.000, pérdida que podría escalar a 5.000 en marzo y solo en el sector asalariado formal de la economía”.
El gobernador advirtió además que “la industria es un sector muy importante en la economía nacional: aporta el 20% del valor agregado y más de la mitad de la producción de bienes; en términos de empleo, explica el 16% del empleo registrado y el 14% de los puestos de trabajo totales”.
Las consecuencias de esto son concretas: cada vez más argentinos y argentinas van perdiendo su fuente de trabajo. Según los últimos datos disponibles, entre noviembre 23 y enero 24, 32.500 trabajadores y trabajadoras de la construcción perdieron su empleo asalariado registrado;… pic.twitter.com/KjR4b3UA6F
— Axel Kicillof (@Kicillofok) May 9, 2024
“Mientras que las manufacturas explican dos tercios de las exportaciones nacionales, de las cuales las industriales representan el 31%. Nuestra Provincia representa el 50% de la industria nacional, por lo que estos datos son una muestra de la aguda recesión que estamos sufriendo”, sentenció.
Caída de los salarios
En las antípodas del pensamiento económico de Javier Milei, Kicillof consideró que “la producción industrial responde linealmente a la destrucción de los ingresos de sectores populares y la reducción del mercado interno” y se refirió a la caída del salario.
“Según los últimos datos disponibles, los salarios perdieron en el 1° bimestre del año un poder adquisitivo similar a la contracción industrial (-20%) y las ventas minoristas en supermercados retrocedieron 13%. Mientras tanto, el salario mínimo y las jubilaciones acumulaban en mayo un retroceso del orden del 30% real”.
Además repudió “la parálisis de todas las obras públicas nacionales”, al considerar que “combinada con el impacto de la devaluación y la caída del consumo, a lo que ahora se suma la apertura de las importaciones, destruyen el tejido productivo del país”. (DIB)