El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, aseguró que “si hace falta, se tomarán nuevas medidas” para mitigar el avance del coronavirus y que su gobierno hará lo que "indique la realidad” para “bajar los contagios”.
“Si hace falta, se tomarán nuevas medidas, porque si no se desborda el sistema o hay miles de contagiados y centenares de muertos”, dijo el mandatario al ser consultado respecto a cómo se seguirán administrando las medidas en la provincia.
Durante una entrevista con Radio 10, reproducida por la agencia Télam, agregó que "el virus en este momento tiene dos caras: las limitaciones y los cuidados personales y la cara optimista de la vacunación, que viene avanzando” y remarcó que "por más complejo que sea, por más angustia que tengamos todos, hay que hacer sacrificios, porque lo cierto es que el resultado es que muere menos gente”.
En este sentido, Kicillof remarcó que se observa "una letalidad más baja, de 1,5%, cuando llegó a ser 3% y en algunos países fue 6% o 7%”.
“Lo que hay que hacer es bajar los contagios, iremos haciendo lo que nos indique la realidad”, explicó, y pidió tener en cuenta que “las cepas son hoy un 60 o 70% más contagiosas”.
El mandatario rescató que “la gran mayoría de la gente” comprende que “estamos dando respuesta, que hay un Estado presente que protege y cuida”.
En este sentido, diferenció lo ocurrido con la estrategia de otros países “donde el neoliberalismo dijo que se salve el que pueda, que se muera el que se tenga que morir" y consideró que lo que hicieron fue "un desastre”.
Al referirse al anuncio hecho por la provincia la semana pasada sobre la firma de un contrato con India para la provisión de 10 millones de vacunas, precisó que “aún falta que la vacuna sea aprobada en Argentina y superar el hecho de que India hoy tiene limitada su exportación”.
El Gobierno de Kicillof firmó un acuerdo para comprar 10 millones de dosis de vacunas Covaxin, extensible por 5 millones más, al laboratorio Bharat Biotech, de la India, y el gobernador dijo que cuando lleguen las dosis se distribuirían "entre todas las provincias”.
Kicillof rescató el hecho de que el promedio de casos de la última semana en territorio bonaerense fue “de 9.950 casos, cuando veníamos de 12.000".
"Logramos bajarlos, pero si no se hacía nada, como pretendían algunos medios, estaríamos en un completo desastre”, dijo.