El concejal de Pilar y Coordinador Ejecutivo de la Superintendencia de Servicios de la Nación, Sebastián Neuspiller, le llevó una propuesta al Presidente Mauricio Macri para achicar el gasto en el PAMI.
El PAMI es la obra social más grande de Latinoamérica, con unos 4,4 millones de afiliados, pero que a su vez tiene uno de los déficits que más impacta en el rojo total de la Nación.
Por eso, la idea de Neuspiller, que fue presentada el año pasado al mandatario nacional, ahora toma otro relieve, de la mano de la necesidad de achicar el déficit nacional, ordenado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sin embargo, aunque admitió que de aprobarse la idea le significaría un ahorro para PAMI, Neuspiller expuso a Pilar de Todos que la idea tiene un “fuerte corte sanitarista”, que apunta a mejorar la atención de los pacientes.
En concreto, la propuesta de Neuspiller apunta a que las obras sociales de origen retengan a sus afiliados una vez que se jubilen y, por ende, no pasen al PAMI.
Así, expuso el médico pilarense, el paciente tendrá un mejor seguimiento de su situación de salud, ya que seguirá dentro del mismo sistema, además de mejorarse las acciones preventivas.
“Hoy cuando un trabajador se jubila pasa al PAMI, sin que venga con historia clínica, por ejemplo, e ingresa a un sistema nuevo. Mi propuesta es que el jubilado continúe en su obra social de origen”, expuso Neuspiller en contacto con Pilar de Todos.
El edil, además, manifestó que será “optativo” para el afiliado, pero expuso que así, además, se mejorarán las acciones preventivas en salud que llevarán a cabo esas mismas obras sociales.
“Hoy las obras sociales no trabajan mucho en prevención, porque a los 65 años dejan de atender al jubilado, justamente en el momento donde más necesita de la atención sanitaria. Si en cambio la persona continúa, sin dudas que las obras sociales harán más foco en evitar varias enfermedades”, añadió.
Si bien Neuspiller insistió en que la idea no tiene necesariamente que ver con una situación económica, y tampoco con desentenderse de los jubilados, expuso que la población tiene una esperanza de vida cada vez mayor, por lo que la relación entre trabajadores activos y pasivos se achica, lo que satura al PAMI.
Además, rechazó la posibilidad de que pueda haber jubilados con mejores prestaciones contra otros, según la actividad a la que pertenezcan.
Incluso, manifestó que tampoco habría problemas con la financiación del sistema, ya que se derivarían los aportes que hace el trabajador a la ANSES, y el jubilado al PAMI, a sus obras sociales de origen.
“Las obras sociales son auditadas por la Superintendencia de Servicios de Salud, y eso seguirá siendo siempre así. La problemática tiene que ver con el envejecimiento de la población que cada vez se extiende más, donde las obras sociales tienen a los pacientes hasta los 60 o 65 años, para luego pasar al PAMI, un sistema nuevo para el paciente, donde no se cuenta con ningún tipo de información previa o historia clínica, y mucho menos con prevención”, concluyó Neuspiller, quien expuso que la iniciativa fue “muy bien recibida por el Presidente Mauricio Macri”.