Tras la denuncia de vecinos que indicaban que en una quinta ciudadanos chinos mantenían encerrados en jaulas a varios perros, el Municipio se acercó hasta el lugar para inspeccionar las instalaciones.
A primera hora del lunes, personal del área de Sanidad Animal y Zoonosis llegó hasta el predio ubicado en la Ruta 25, Km 10, camino a Moreno para constatar la denuncia que realizaron los vecinos a Pilar de Todos y que se viralizó en redes sociales con un video filmado por una estudiante de veterinaria, quien incluso temía que los perros fueran comidos.
Allí, los inspectores constataron la existencia de canes en una jaula "muy pequeña" por lo que procedieron a labrar un acta de infracción por maltrato animal. Pero además, descubrieron que uno de los animales tenía las orejas cortadas "a cuchillo".
“A primera hora nos acercamos al predio donde vive un matrimonio chino, se sacaron fotos, y se visualizaron a los perros”, relató Marcelo Bradley, Director de Zoonosis a este medio.
El funcionario agregó que al momento de la inspección “había cuatro perros: dos de ellos son cachorros que fueron encontrados con las orejas cortadas en forma casera”.
“Tenían cortes que se los hicieron a cuchillo. Luego había otro perro encadenado y otro metido adentro de una jaula muy pequeña”, contó Bradley.
Dos de esos animales fueron retirados del predio y trasladados a Zoonosis para recibir asistencia, al tiempo que no se dejó de advertir a las personas propietarias del lugar que ahora deberán acercarse al área municipal para comprender los motivos de la sanción recibida.
Idioma
Por otra parte, el titular de Zoonosis, detalló que el procedimiento que se llevó adelante fue dificultoso ya que fue casi imposible entablar un diálogo con el matrimonio asiático.
“Intentamos entablar una conversación con el matrimonio, pero fue imposible por el idioma. No hubo forma de hacernos entender, aunque sí sabían que les hablábamos del tema de los perros”, consignó Bradley.
Es por eso, que, más allá de que la infracción ya ha sido labrada y elevada al Tribunal de Faltas, el matrimonio deberá asistir a la Comuna con un intérprete, para conocer los alcances de la sanción.
“El parte de infracción ya está hecho. Además, les vamos a exigir que castren a los animales que tienen en su poder”, completó Bradley.
Es que, por último, en el procedimiento concretado, los inspectores tomaron contacto con vecinos de la zona quienes sí manifestaron que les llama la atención la rotación de perros que hay en el lugar.
De hecho, la denunciante, ante esa situación, había deslizado que creían que los perros, luego de ser encerrados, se los comían.
“Puede ser que los regalen o los vendan. Ningún vecino con los que se habló refirió que este matrimonio se coma a los perros”, descartó Bradley.