Los vecinos del Barrio Chico de Almirante Irízar amanecieron este jueves con una imagen dantesca sobre la calle principal de la zona: los postes que soportan el tendido eléctrico se habían desplomado sobre la arteria.
Todo sucedió sobre la calle Los Estribos, la única que los habitantes del lugar, que tiene una extensión de tres manzanas, usan a diario para dirigirse a sus trabajos y desarrollar su vida cotidiana.
Con los cables a la altura de cualquiera que por allí pasara, los vecinos quedaron casi sin poder salir de sus casas, a menos que atravesaran un campo que los conecta con otra salida, camino que muchos decidieron tomar para poder empezar el día.
La zona, en tanto, sufrió un corte de energía generalizado que se extendió durante gran parte del día. Con el peligro al alcance de la mano, los vecinos informaron de lo sucedido a la empresa que brinda el servicio, EDEN.
Lamentablemente, la situación se cobró sus víctimas ya que tres perros, según contabilizaron los vecinos, murieron electrocutados al tomar contacto con los cables que yacían en la arteria.
“Esto pasó porque hace unas semanas, cuando tuvimos el mismo problema, desde EDEN vinieron a arreglar los postes que se habían caído. Pero lo que hicieron fue solo apuntalarlos, atándolos con alambres. No le dieron la profundidad necesaria, y se volvieron a caer”, relató Germán Torres, vecino de la zona.
Entrada la tarde, la empresa ya se encontraba en el lugar restableciendo el servicio. Mientras tanto, los vecinos que reciben el suministro desde esa compañía se mostraron molestos por la mala calidad del mismo.
“Mirá si estaremos mal, que estamos pidiendo poder contar con el servicio de EDENOR”, se lamentó Torres en diálogo con Pilar de Todos.