El Juzgado Federal de Zárate Campana decidió hacer lugar a la medida cautelar solicitada por un grupo de vecinos de Villa Rosa y Escobar, y dispuso que se frenen las obras en una de las termoeléctricas que se construyen en la zona.

El pedido de los vecinos hace referencia al presunto grave impacto ambiental que generarán las plantas (se construyen dos), aunque desde las firmas sostienen que dicha contaminación no es tal.

De todos modos, el Juez Adrián González Charvay resolvió otorgar el amparo, una medida transitoria hasta que se analiza la cuestión de fondo, es decir si las plantas son contaminantes y cuentan con toda la documentación para funcionar.

El Juez, en ese marco, resolvió “ordenar a la empresa APR Energy a la suspensión de la construcción de la central termoeléctrica,  de su operación y/o ensayos de prueba, y/o acopio de combustible, y/o el indebido uso de las aguas subterráneas o de red, desvío de desagües naturales, emisiones sonoras, efluentes gaseosos, vertidos de efluentes líquidos, movimientos y compactación de tierra, construcción de calles consolidadas, manejo y/o acopio de combustibles”.

Por otro lado, “prohibió el uso del recurso hídrico subterráneo o de red pública y la suspensión de vertidos de efluentes líquidos, todo ello hasta tanto se dicte sentencia definitiva en las presentes actuaciones”, añadió Charvay.

Además, señaló el Juez, “previo a dar cumplimiento a lo dispuesto (…) los actores deberán prestar caución juratoria por los daños y perjuicios que pudiere ocasionar el cumplimiento de la medida otorgada (…)”.

Este último punto, significa que en caso de que el Juez resuelva que las obras pueden a futuro seguir en el lugar, la empresa podrá reclamarle a los denunciantes por los daños ocasionados en la demora en la puesta en marcha de las plantas.

El pedido de amparo había sido presentado ayer por un grupo de vecinos de Villa Rosa y Escobar, quienes luego se movilizaron a la Plaza 12 de Octubre de Pilar donde reclamaron que las centrales sean trasladadas a áreas alejadas de zonas residenciales.

La otra planta, Araucaria Energy, también es cuestionada por los habitantes de la zona, quienes adelantaron que también solicitarán un amparo del mismo tenor que el aceptado por la Justicia.