La organización Ambientalistas Autoconvocados de Pilar presentó un escrito en los Juzgados Federales de Campana por medio del cual buscan frenar las obras en una tosquera de la ruta 34.
La entidad, presidida por Érica Hahn, interpuso una acción de amparo y demanda por prevención de daño ambiental contra la Municipalidad de Pilar, con el objeto de lograr el cese de extracción en el suelo, habida cuenta que ese tipo de labores con fines comerciales están prohibidas en Pilar desde 1995 (ordenanza 81/95).
En el lugar se autorizó semanas atrás la construcción de una laguna de varias hectáreas para buceo, pero desde Ambientalistas Autoconvocados señalaron que la cava existente es más pequeña que la autorizada, por lo que se permite la extracción y comercialización de tosca, este último punto prohibido claramente en la legislación local.
En el escrito, los abogados de los ambientalistas pidieron que se decrete una medida cautelar y se ordene suspender "inmediatamente" la ejecución de obras y toda actividad extractiva, dado que la misma se encuentra prohibida.
Pero en el caso de que no se considere actividad extractiva, de todos modos pidieron que se frenen las labores hasta tanto se obtengan las habilitaciones ambientales administrativas necesarias y se adecue la actividad al concepto de sustentabilidad en torno a los recursos afectados.
Además de la laguna de buceo, también hay otro proyecto, "Cantera La Paloma", aún no autorizado por el legislativo, para que en el mismo predio se haga otra cava para luego rellenarla con restos de poda y escombros.
Para los ambientalistas, esas iniciativas son "absurdas" y encubren en realidad el verdadero objeto de los emprendimientos: la extracción y comercialización de tosca.
Desde Ambientalistas, además, reforzaron esa hipótesis al señalar que uno de los desarrolladores del emprendimiento, "GRUPO MCT S.A." tiene como actividad principal la actividad minera. Otra de las empresas que llevará a cabo el proyecto es Automotores H Ricardo Elliot S.A., firma que pertenecería a un familiar de un exfuncionario comunal.
Más se encendió la alarma de Autoconvocados cuando el intendente Nicolás Ducoté expuso que la Comuna necesita tosca para el mantenimiento de calles de tierra, que se gastan unos 25 millones de pesos al año en ese material, y de tener una tosquera cerca se podrían abaratar costos, ya que el 70% del valor es por el flete.
Incluso Ducoté pidió al Concejo Deliberante que en todo caso revise la normativa de 1995 y que si es necesario la derogue, al señalar que incluso podría haber sido promovida en su momento con el objeto de favorecer a canteras ya instaladas.
La ONG ya le había enviada una nota al jefe comunal para que frene las labores, pero al no obtener respuestas es que optaron por la vía judicial.
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