El vicepresidente de Boca Juniors, Juan Román Riquelme, y su hijo Agustín, deberán ir a juicio por violar las restricciones decretadas para evitar contagios de coronavirus.
La causa se inició luego de comprobar que el joven de 18 años estuvo presente en la Bombonera en el partido entre Boca y River del 14 de marzo pasado.
Así lo decidió la fiscal en lo penal y contravencional Celsa Ramírez a raíz de que el joven viajó a Cancún y al día siguiente de haber regresado, en un vuelo con 44 estudiantes contagiados de coronavirus, asistió a la cancha cuando debía haber estado cumpliendo el aislamiento en su vivienda, ubicada en una urbanización cerrada de Pilar.
Sin embargo, las imágenes lo captaron en la cancha de Boca en el partido frente al conjunto de Núñez.
La acusación no sólo es contra el joven sino también contra Riquelme por infringir el artículo 205 del Código Penal, que sanciona de seis meses a dos años al que viola las medidas impuestas por el Poder Ejecutivo en plena pandemia para evitar el contagio de coronavirus y también por el artículo 202, que castiga a aquel que propagare una enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas.
Ahora, el pedido de la fiscal va a ser evaluado por el juez en lo penal y contravencional y pueden imponerse penas o bien llegar a un acuerdo que incluye una probation, esto es realizar tareas comunitarias a cambio de no ir a juicio y exponerse a una pena.
Al formular la acusación, la fiscal dijo que Agustín Riquelme formó parte del grupo de jóvenes que viajaron a Cancún en un viaje de egresados y que al regresar a Argentina detectaron al menos que cuarenta de ellos estaban contagiados de coronavirus, varios de ellos estudiantes de instituciones privadas del partido de Pilar.
Tal cual disponen las medidas, a su regreso debía guardar aislamiento por diez días, pero al joven se lo vio en la cancha de Boca en ese Superclásico.
Incluso, en la imagen captada por las cámaras que están en poder de la fiscal, también se ve a Juan Román Riquelme al lado de su hijo junto a otras personas, sin respetar la distancia social y sin utilizar tapabocas.