Inspectores del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires clausuraron una fiesta clandestina en Pilar, en el marco de una serie de controles que se realizaron en varios puntos del conurbano.

Los controles estuvieron a cargo de la Dirección para la Gestión de la Seguridad Privada, a cargo de Marcelo Montero, en operativos conjuntos con el personal del ReBA (Registro provincial para la comercialización de bebidas alcohólicas), ReCap (Registro Público de Controladores de Admisión y Permanencia), Agencias Privadas y los grupos especiales de la Policía GPM y GAD.


El evento desactivado en la madrugada de este martes, en la calle José María Paz al 1500, indicaron fuentes del Ministerio, se constató no solo el evento prohibido por las medidas de prevención del coronavirus, sino también la presencia de menores de edad y la venta de bebidas alcohólicas.

En el lugar, una casa quinta acondicionada para funcionar como boliche con luces y enormes parlantes, siempre de acuerdo a las fuentes, había alrededor de 150 jóvenes, y se cobraba una entrada de 200 pesos para poder ingresar.

"Mi función es la de fiscalizar y controlar la nocturnidad; tarea que se vio intensificada como consecuencia de los ítems dispuestos a través de la etapa del Dispo, por la pandemia", expresó Montero.

«Tenemos un excelente equipo de trabajo que hace grandes esfuerzos, para lograr llevar tranquilidad a los habitantes de la provincia de Buenos Aires, fiscalizando y concientizando por expreso pedido del ministro Sergio Berni, sobre la importancia de cumplir con todo lo que marca la ley y dejar en manos de la justicia a quienes se manejan por fuera de la ley", agregó.

Este fin de semana largo, además, se clausuraron otras fiestas ilegales en Tigre, Ezeiza, Mar del Plata y La Plata, entre otras.