Desde el pasado sábado comenzó a regir un nuevo cambio de sentido de circulación vehicular en una de las zonas más transitadas del distrito.
Se trata de la colectora oeste, que a la altura de la futura maternidad, se convirtió en mano solamente hacia la Ciudad de Buenos Aires, en el tramo que va desde las calles Guido hasta Las Madreselvas.
Pero, pese a las señales de “contramano” que ya están colocadas en la zona, en este primer día hábil de la semana, fueron centenares los conductores que se mostraron entre sorprendidos y confundidos por la nueva medida.
Muchos de ellos, tal vez por la costumbre, intentaron circular como si la calle aún fuera doble mano. Intentaban llegar al centro médico privado que existe en la zona o a las diversas oficinas y dependencias que están instaladas allí.
Pero, al cruzar el puente de Panamericana, se encontraron con la presencia de agentes de tránsito de la Comuna que les advertían la nueva señalización y los desviaban para que recalculen el viaje.
El cambio de sentido de los vehículos tiene una explicación: Es que desde la Subsecretaría de Tránsito y Transporte están abocados a lograr que el acceso a la futura maternidad sea para la población lo más ágil y segura posible, sobre todo para aquellos que llegarán por medio de alguna de las tres líneas de colectivos que ya llegan hasta el lugar.
En ese contexto, la titular de esa dependencia, Claudia Guerrero, señaló a Pilar de Todos que “era casi imposible que los colectivos que ya cuentan con una parada en la puerta del nosocomio puedan transitar por colectora de manera segura si la misma se mantenía con doble mano de circulación”.
“Estamos implementando la contramano para darle prioridad a la circulación de los colectivos que acercará pasajeros y futuros pacientes a la maternidad. Con doble sentido de circulación y estacionamiento en ambas manos, era casi imposible que pudieran circular”, insistió la funcionaria que en la mañana de este miércoles se encontraba en el lugar.
Frente a la incesante circulación ahora errónea de los automovilistas, Guerrero reconoció que “costará” que la medida se cumpla, como ocurrió con la modificación del puente Champagnat, pero al mismo tiempo se mostró optimista.
“Sabemos que va a costar, pero creo que la propia dinámica, cuando ya esté inaugurado el Hospital, va a hacer que ya no haya chance de circular en contramano”, dijo la funcionaria.
Hasta el momento, agregó la titular de Tránsito, quizás “la gente no tiene del todo claro que los cambios tienen que ver con el futuro funcionamiento del Hospital” por lo que aseguró que los agentes continuarán en la zona para brindar información.
Por otro lado, desde su área, también están abocados a organizar el acceso propiamente dicho al playón de la Maternidad.
“Queremos lograr que este empalme, entre la calle Madreselvas y la colectora no se transforme en lo que sucede en otras zonas de Pilar, como por ejemplo la calle Tratado que cuenta con 26 giros”, remarcó Guerrero.
“Tenemos que tratar de tener la menor cantidad posible de giros. Estamos ocupándonos de ver cómo se implementa la circulación para que no tengamos siniestros en la puerta de la maternidad”, consideró.
Multas a los que estacionen en zonas de ambulancias
Por otra parte, los agentes de tránsito también tienen el ojo puesto en aquellos automovilistas que dejen sus vehículos mal estacionados en la zona de acceso y giro de las ambulancias del SAME.
Las mismas cuentan con un playón desde donde salen a las emergencias en el predio del futuro Hospital Central, pegado al Centro Médico Deragopyan.
Con la correspondiente señalización de “Prohibido Estacionar”, aun se pueden ver algunos autos estacionados en esa zona reservada, a los que los agentes les labran las correspondientes multas.
“No es una medida caprichosa. Un auto estacionado ahí es un obstáculo en una emergencia”, alertó Guerrero.