Fruto de la cuarentena obligatoria por la pandemia del coronavirus, y el cierre de varias actividades económicas no esenciales, las ventas en el comercio minorista de Pilar se contrajeron en un 47% en abril, comparado al mismo mes del 2019.
Lógicamente todos los rubros mostraron fuertes caídas, al no poder comercializar sus productos y en donde la venta online prácticamente no es utilizada, mientras que sí mostraron mejoras Ferretería y Alimentos y bebidas, dos negocios que sí pueden prestar servicios.
Según el informe mensual de la Cámara de Comercio de Pilar (SCIPA), Indumentaria cayó un 100%; Juguetería se contrajo un 92%; Bazar y Regalos disminuyó un 91%, entre las que no tuvieron actividad.
Golosinas, por su parte, mermó sus ventas, pese a ser una alimenticia que continuó abierta, un 4%.
Por otra parte, sí registraron un repunte otras 2 actividades esenciales, como Alimentos y bebidas, y Ferretería. En todos los casos tomando en cuenta unidades vendidas.
La primera de ellas creció un 2,10%, mientras que la segunda un 1,30%.
Desde la SCIPA expusieron que el impacto de la merma en la mayoría de los rubros es “alarmante y devastador”, y recordaron que la disminución de ventas ya se arrastra desde hace 2 años.
“La medidas sanitarias aplicadas a partir del mes marzo de este año por la pandemia obligaron a los comercios de rubros no esenciales a tener que cerrar sus puertas, como, indumentaria que reflejó el 100% de caída, Juguetería, con una baja del 92%, Bazar y Regalos, con un 91% menos. Mientras que otros rubros que pudieron tener actividad, mantuvieron los resultados con los meses anteriores”, señalaron desde SCIPA.
“Fue un mes devastador para el comercio minorista de proximidad, ya que fueron los únicos solidarios y cerraron sus negocios para colaborar con el aislamiento obligatorio, a diferencia de las grandes superficies que sin condicionamientos pudieron seguir ofreciendo productos no esenciales. Pedimos a las autoridades municipales que se trabaje en un protocolo de trabajo para que los comercios de proximidad de los rubros no esenciales puedan volver a la actividad comercial controlada y así revertir la gravísima situación económica y financiera que deben afrontar”, expusieron.
En marzo, la contracción había alcanzado el 11%, siempre comparado al mismo mes de 2019, al tiempo que desde SCIPA ya alertaban que peligraban sueldos y puestos de trabajo y pedían ser eximidos del pago de tasas locales.
Días atrás, se conoció que unas 70 empresas y comercios pidieron volver a la actividad. Si bien en su mayorìa se trata de exportadoras y firmas que tienen procesos industriales específicos para sujetos exceptuados, como plantas que elaboran empaques para la alimenticias, también aparecían allí pequeñops comercios, como lavadores, viveros y casas de venta de ropa y celulares.
Si bien la Comuna expuso que se analizarán los pedidos que tienen respaldo en el Decreto Presidencial que estableció la cuarentena y sus modificaciones, señalaron al mismo tiempo que no se autorizarán otros rubros que no estén avalados por el gobierno nacional.