La muerte de una joven enfermera que se desempeñaba en el Hospital Sanguinetti a causa del COVID-19 encendió las alarmas en sus allegados y compañeros de trabajo.
Noemí Gómez, de 32 años, trabajaba en los consultorios externos de pediatría del centro asistencial de Pilar, y perdió la vida en un cuadro que súbitamente se agravó y desembocó en su fallecimiento.
Gómez, madre de dos niños, comenzó a sentirse mal el fin de semana pasado. Fue atendida primero en el Hospital Sanguinetti, donde se le hicieron tomografías que mostraban una respuesta inflamatoria de los pulmones.
Incluso rápidamente se la sometió a tratamiento con plasma, mientras estaba ya internada en la terapia intensiva de la clínica Fátima de Pilar con asistencia respiratoria, pero no se pudo evitar el desenlace fatal.
En medio del dolor y la consternación, el titular de Salud de Pilar, Hernán Galimberti, pidió a la sociedad extremar las medidas de precaución, como el lavado de manos y uso de barbijos o tapabocas, y no “banalizar o menospreciar” la enfermedad.
"Hoy es un día de mucho dolor para todo Pilar y todo el personal de salud. Falleció una enfermera, compañera de trabajo, joven, que evolucionó rápidamente en una insuficiencia respiratoria, neumonía, que generó un desenlace fatal en pocas horas”, relató Galimberti en contacto con el programa Agenda Propia FM, de 105.9.
“Este virus, así como en la mayoría de los casos se comporta en una forma benigna, lo que desconcierta a la gente, en un grupo pequeño, el 10%, genera respuestas inflamatorias en el organismo, no se sabe bien aún porque, y deriva en estos desenlaces fatales que dan mucho dolor a todo el grupo y personal de salud, que día a día estamos combatiendo esta pandemia. Noemí no tenía antecedente patológico, era una persona joven, de 32 años, trabajaba en el área de consultorios externos de pediatría, donde estuvo hasta el jueves o viernes”, agregó.
El titular de Salud explicó que la mujer fue sometida rápidamente a un tratamiento con plasma, incluso se le llegó a pasar la primera unidad, pero la respuesta inflamatoria generó una “insuficiencia respiratoria tremenda”, lo que desembocó en el deceso.
“El fin de semana empezó a sentirse mal, con fiebre, consultó en la madrugada del lunes, rápidamente se hizo el hisopado. Tuvimos el resultado en menos de 24 horas e inclusive sin el diagnostico confirmado, por las características de las imágenes de la tomografía, que era una neumonía muy extensa en los dos pulmones, se le pidió el pasma, se le pasó la primera unidad, pero evolucionó con una insuficiencia respiratoria tremenda. Estamos en la primera línea de batalla y con estos desconciertos que nos da este virus”, continuó el médico.
Galimberti alertó que la circulación viral “es muy alta a nivel de toda la comunidad”, al tiempo que mucha gente está más “relajada” al no todos los casos ser graves.
“Nosotros, que estamos viendo la otra parte de esta pandemia, que es adentro de las instituciones, vemos otra realidad. Sabemos que en un porcentaje menor se desencadenan estos desenlaces que dan mucho dolor a todo el personal de salud. Yo tengo 30 años de médico, 20 años de terapista, y la verdad que esto desconcierta. En pacientes es un simple resfrío y en otros pacientes, sanos también, puede llegar a estos desenlaces. Esto nos tiene que ser de enseñanza de la importancia que es el cuidado, del barbijo, del lavado, de los elementos de protección. Porque uno tiende a ver que en la mayoría de los casos es algo banal, la gente lo menosprecia, pero es una señal de alerta para el cuidado”, cerró.
