El gobierno municipal apura la puesta en marcha del sistema de fotomultas en Pilar; puestos móviles serían el primer paso.
Es que para la colocación de los cinemómetros fijos aún se necesita tiempo, por la conectividad que llevan los equipos, además de la cartelería que se busca añadir no solo advirtiendo de la presencia de los radares, sino también informando cuál es la velocidad máximo permitida en esas rutas.
“Estamos haciendo un relevamiento de los lugares en donde colocar los radares, y a su vez trabajando sobre la señalética. Pero ese proceso va a demandar al menos 60 días”, explicó el intendente Nicolás Ducoté a Pilar de Todos.
Los lugares en donde se coloquen los radares, de todos modos, deberá ser refrendado por el Concejo Deliberante, pero la idea del mandatario local es comenzar a trabajar sobre algunas rutas, como la 234, con camionetas equipadas con cinemómetros.
“Hay un tramo nuevo de la 234 que ya fue habilitado, tras el arreglo, y en solo 10 minutos que estuve ahí vi decenas de vehículos que iban a 120 o 130 kilómetros por hora. De hecho, son los vecinos los que nos piden que hagamos controles. Lo mismo vamos a hacer con la ruta 25, sobre todo una vez que se repare entre Pilar y Escobar, y en lugares en donde los habitantes nos digan que se necesitan los radares, como cercanías de escuelas o cruces peligrosos”, completó Ducoté, mecanismo que podría debutar en las próximas semanas.